Jidón Hatzionut, un proyecto en movimiento
Sharon Skvirsky C.
El Jidón Hatzionut es un proyecto que lleva muchos años existiendo, pero manteniéndose a la vanguardia de la educación, siempre buscando mejorar para ir más allá de un simple concurso. Actualmente, este proyecto es organizado por el Consejo Sionista de México, La Agencia Judia para Israel, Bitui, Vaad Hajinuj, Keren Kayemet y Keren Hayesod. Estas instituciones nacionales sionistas invitan a los alumnos de los colegios de la red judía de México y Tnuot Noar a participar en un foro donde poner a prueba los conocimientos sobre Israel y el sionismo es el centro del concurso. Está abierto para jóvenes de entre 12 y 18 años de edad.
Mencionado un poco del contexto, en octubre del 2017 surgió una inquietud en una de nuestras presentaciones con los directores de escuelas dentro del marco de Vaad Hajinuj, queriendo adaptar este proyecto a una forma actual de enseñanza-aprendizaje, donde no solo se abordaran aprendizajes que memoricen los participantes, si no más bien promover la comprensión y análisis para que los alumnos apliquen sus conocimientos y desarrollen un pensamiento crítico, así como brindar estrategias para la resolución de problemas.
En esta reunión, se logró juntar una mesa de voluntarios interesados en este tema para diseñar una nueva propuesta, involucrando nuevas instituciones para contribuir a la mejora educativa. Fue y sigue siendo un camino lleno de aprendizaje para perfeccionar la idea. Las modificaciones que se hicieron al proyecto, han contribuido al interés de los jóvenes y han logrado aprendizajes significativos y perdurables.
El modelo de debate que utilizamos actualmente está inspirado en el modelo del Concurso de Debate Político de IMJUVE, que ha realizado más de 25 ediciones anuales.
En este modelo utilizamos mucho el concepto del debate, el cual se pude definir como “la discusión ordenada y moderada de argumentos que parten de una tesis o pregunta de debate, en el que necesariamente hay una posición encontrada, esto es, que hay una postura a favor y otra en contra”.
Los criterios de evaluación son el conocimiento, la profundidad, argumentación y la formulación de réplica.
El proyecto se ha ido adaptando a través de los años a la nueva forma de enseñanza-aprendizaje a través de la colaboración con maestros, alumnos, directores e instituciones, tratando de aplicar y adaptar las ideas a este mundo VUCA (volátil, incierto, complejo y ambiguo) actual que es todo lo contrario a estable y predecible en el que vivimos, seguir, proponerse a mejorar y adaptarse, es la clave del éxito de este proyecto.
